Recientemente se programó en Barcelona una obra de teatro llamada "Jo soc la meva dona", basada en un libro del mismo título. No pude ver la dramatización y desconocía la existencia del libro pero me lo encontré hace unas semanas sin buscarlo en una librería y decidí comprarlo sin especial motivación (porque la portada de la editorial Tusquets no prometía nada emocionante, solo una narración doméstica y tal vez algo neurótica). Pero he aquí que ante mi sorpresa he acabado leyendo un interesante relato y además muy bien escrito. Por lo inusitadamente aventuresco incluso lo he leído como una auténtica novela.
La memoria personal cede también mucho protagonismo al momento histórico de su situación. Esta mujer, nacida hombre, nos cuenta los avatares sufridos durante su vida en Alemania antes del advenimiento de Hitler, durante el nazismo y en el periodo socialista de lo que se llamó Alemania del Este. Ninguno de estos momentos históricos fue propicio para mostrar en público su verdadera personalidad y desde luego, durante el libro nos apenamos sinceramente de que no pudiera apenas disfrutar de auténtica libertad hasta la caída del muro, ya bastante mayor. Sus peripecias vitales conforman un vívido retrato de cada momento social y sus dificultades, aunque algo mayores que para otras personas, no dejan de hacerse extensibles al resto de sus conciudadanos ya que las restricciones democráticas son para todos (o casi todos). Al final su lucha tiene un cierto final feliz y nos da una auténtica lección de cómo luchar por ser lo que uno quiere ser, incluso en las circunstancias más adversas.
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